Ayer, después de una serie de gestiones administrativas realizadas en tiempo récord, fue relevada del cargo la subcomisaria María Rosa Almeda, quien había asumido al frente de la Comisaría 31 de Rosario de la Frontera, el pasado jueves 27 de enero por disposición de la superioridad, debido a que el comisario titular, Juan Ariel Escalante, se encuentra de licencia. En tanto, el oficial José Emiliano Leguizamón, que se encontraba al frente de la dependencia de la localidad El Jardín -vecina de la ciudad termal-, fue ascendido al cargo de subcomisario y luego puesto a cargo de la conflictiva dependencia.
Las graves versiones
El detonante que sacó a la luz la grave interna del personal policial fue la distribución de un panfleto que inundó las calles de la ciudad rosarina y que lleva el sello de la dependencia, en el que cuestionan el accionar de la subcomisaria María Rosa Almeda y la responsabilizan de dos muertes, ocurridas hace 9 años a consecuencia de delitos.
De acuerdo con datos recogidos por El Tribuno, este panfleto no es el primero, sino que años atrás ya había habido otros en contra de la mencionada funcionaria, además de una serie de versiones que se hicieron circular en las que se pone en tela de juicio su integridad moral.
Según lo que se pudo saber, el conflicto con Almeda se originó en la huelga policial de 2008, cuando fue acusada de boicot. Esa medida terminó con tres uniformados rosarinos desafectados de la fuerza.
La presencia del gobernador
El detonante fueron panfletos que llevan el sello de la dependencia y la responsabilizan de dos muertes.
Los panfletos que inundaron la ciudad termal se distribuyeron ayer cuando se esperaba la visita del gobernador Juan Manuel Urtubey y sus funcionarios, entre ellos el secretario de Seguridad, Aldo Saravia, y el jefe de Policía, comisario mayor Néstor Cardozo, quienes participaron de las fiestas patronales en la localidad de La Candelaria, ubicada a unos 60 kilómetros de Rosario, y arribaron a la ciudad sureña pasadas las 15. Si bien las autoridades recalcaron que el subcomisario José Emiliano Leguizamón fue designado temporalmente, hay disconformidad en la fuerza y en la comunidad porque se considera que no está preparado para esa responsabilidad, ya que pasa de una dependencia que tiene a cargo una población de 1.000 habitantes a una de 40.000.
“Dos muertes en vano”
Ese es el título del panfleto que en las siguientes líneas se transcribe parcialmente: “Hace ya 9 años que en el interior de la Sociedad Española, donde se llevaba a cabo la realización del conocido baile ‘El Túnel del Tiempo’ perdió la vida Jesús González, un joven que tenía toda una vida por delante (...) que salió a vivir un momento de diversión y encontró la muerte dentro de un baile (...) ¿saben quién era la responsable esa noche de cuidar la seguridad de todas las personas?: la actual subcomisario Almeda, que en ese entonces era oficial principal, de ella dependía la vida de este joven, ahí dejó plasmada toda su inoperancia, el poco profesionalismo (...), pero sigue aquí, jactándose y amigándose con todos los medios de comunicación y políticos; ¿recuerdan a Carlos Rodríguez que fue apuñalado en la puerta de Burbuja? ¿saben quién estaba a cargo la dependencia? la subcomisario Almeda...”.
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