Estamos pasando por un momento de stress y de angustia por toda esta problemática”, manifestó el comandante del Cuerpo Activo de Bomberos Voluntarios “Ciudad Termal”, de Rosario de la Frontera, José Exequiel Álvarez, con respecto a la cantidad de suicidios ocurridos en esa localidad.
Consultado por la causa que llevaría a los jóvenes a tomar esta drástica decisión, Álvarez argumentó: “Yo fui el que hizo público que algo anormal está pasando con los chicos y que desencadena esto”, al tiempo que negó que los suicidios tengan relación con las drogas o con la desigualdad social, ya que “la mayoría de los chicos estaban en muy buena situación económica y no tenían ningún problema familiar grave”.
En tanto, el comandante insistió en que en el cuartel de bomberos están pasando cosas “sobrenaturales” y que por ello se consultó a profesionales que en los próximos días arribarán a la ciudad termal para brindarles asistencia.
Además, aseguró que los bomberos cuentan con el apoyo de los vecinos de Rosario de la Frontera, que también aseguran haber vivido situaciones fantasmagóricas.
“Una señora me comentaba que estaba cocinando y escuchaba que corrían las sillas y las risas de sus hijos pero luego se fue al comedor y no encontró a nadie. O sea, cosas como esas también pasan en algunos hogares de Rosario de la Frontera”, relató.
Álvarez sostuvo que en referencia a estos hechos se podría hablar de la existencia de fantasmas o de algo hipersensorial: “ruidos que se escuchan debido al estrés que estamos pasando, a la angustia, a la tensión que tenemos debido a los servicios”, explicó y añadió en una entrevista con el intransigente.
“En estos momentos tenemos problemas como que nos golpean las manos, nos levantan la cortina del autobomba y bajan violentamente, hacen ruidaje en el silencio de la noche, les tiran los pies a los bomberos cuando están durmiendo, las ollas, los platos, las puertas de los baños se abren y cierran violentamente… son algunas de las cosas por las que a las seis de la mañana yo vengo y los encuentro a todos los que están de guardia afuera”.
Por otra parte, aclaró que en las notas que brindó y que luego fueron publicados también hay testimonios del resto de los bomberos pero desmintió que haya sido él quien manifestó que uno de los chicos que estaba por quitarse la vida tenía mirada “límbica”. Aunque reveló que es “investigador de todos los fenómenos raros que pasan en Rosario de la Frontera”.
Finalmente, Álvarez aseguró que los sucesos paranormales que se viven en el cuartel de bomberos no tiene nada que ver con el suicidio de los chicos de Rosario de la Frontera. Aunque durante toda la entrevista periodística dio a entender que ambas situaciones estarían vinculada
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